El chef Tomás Treschanski abrió las puertas de un espacio sin igual. Comensales limitados, maridajes impensados y una oportunidad única de experimentar en una de las cocinas más creativas de Buenos Aires.
Una experiencia culinaria de primer nivel abarca un universo de componentes que van desde lo tangible hasta lo indescriptible. Debe atravesar el cuerpo con aromas, sabores y sensaciones que excedan el plato. Eso es lo que propone el restaurante de Tomás Treschanski, un espacio exclusivo que reúne ideas tan novedosas como deliciosas. Con tan solo 10 lugares, Trescha es un absoluto éxito.
Tomás volvió para asentarse en Argentina y establecer una novedosa propuesta gastronómica de fine dining.
El chef goza de una inabarcable trayectoria, atravesada por algunas de las cocinas más reconocidas del mundo. Luego de sus aprendizajes, Tomás volvió para asentarse en Argentina y establecer una novedosa propuesta gastronómica de fine dining. Su cocina es creativa e intrigante, aun así deliciosa. Cualquier comensal que pase por Trescha diría lo mismo que él en su biografía de Instagram, “comiendo ideas”.
La modalidad Chef’s Counter que propone el restaurante, implica una cantidad de comensales limitados (10) sobre una barra, mientras observan en primera persona la elaboración de cada plato. El programa contiene cuatro propuestas de maridaje diferentes, atravesadas por 15 copas por comensal procedentes de botellas de Argentina y el mundo.
La modalidad Chef’s Counter que propone el restaurante, implica una cantidad de comensales limitados (10) sobre una barra, mientras observan en primera persona la elaboración de cada plato.
Cada plato es una experiencia multisensorial, los cuales sólo podrán descubrirse al sentarse en la barra de Trescha. La bebida también tiene su protagonismo. Cada copa está pensada a medida para acompañar un momento y sabor particular. Estas abarcan tanto licores como bebidas sin alcohol que se equilibran para asegurar una cena sin igual.
El broche de oro que convierte a este restaurante en una experiencia con todas las letras es la Test Kitchen, un laboratorio gastronómico dedicado a la experimentación culinaria. Este espacio reúne al chef y a los comensales en un divertido intercambio por búsqueda de sabores y texturas. Aquí todos observan y prueban las maravillas que se pueden lograr en una cocina de este calibre, coronando con un momento de disfrute absoluto. Un restaurante que promete dejar un recuerdo inolvidable en los paladares de sus visitantes.