Presencial y en todo su esplendor

DEL 8 AL 12 DE SEPTIEMBRE SE LLEVÓ A CABO LA SEMANA DE LA MODA DE NUEVA YORK, EL EVENTO DE MODA MÁS A NIVEL INTERNACIONAL QUE, ESTE AÑO, PUDO RETOMAR UN CALENDARIO REPLETO DE DESFILES PRESENCIALES. LES ADELANTAMOS TRES COLEC-CIONES DE LA TEMPORADA PRIMAVERA-VERANO 2022 QUE SE ROBARON TODAS LAS MIRADAS.

TOM FORD

Su presentación fue una de las sensaciones de la Gran Manzamoiré con pantalones jodhpur de terciopelo. En una era de na al inyectar dinamismo europeo en su propia marca. Ya no se vieron propuestas de prendas para quedarse en casa, sino que trajo a la pasarela el optimismo italiano de los ochenta y la elegancia francesa de los setenta, con un toque de Los Ángeles. Su colección  pasa inadvertida, como su pantalón Capri con combos de blazer en estampados dorados de leopardo; o sus camisas anudadas de terciopelo búsqueda de atención con colores vibrantes, Ford crea prendas que buscan atención, para clientes que buscan atención, al igual que su audiencia que se reunió en el Teatro David H Koch en el Lincoln Center for the Performing Arts. Los looks estaban acompañados de grandes y atrevidos accesorios: collares gruesos, cinturones de oro anchos y pulseras metálicas brillantes. Cuantos más, mejor.

CAROLINA HERRERA

La casa de moda celebró sus orígenes en la Semana de la en una paleta de colores desde los clásicos blanco y negro Moda de Nueva York con una colección que ensalzó el glamour y la irreverencia de la década de los ochenta. Para celebrar sus cuatros décadas en el mundo de la moda, la diseñadora Wes Gordon eligió el Salon 94, una galería de arte en una mansión señorial situada en el barrio del Upper East Side, para presentar sus creaciones ante un público reducido de solo 100 personas. El vestido fue la pieza estrella hasta tonos saturados en rojo, naranja, azul o rosa, algunos de siluetas con mangas abullonadas o faldas de volantes. Con un enfoque lúdico entre volúmenes que dibujan capas en el cuerpo dejando ondear una delicada cola de seda al paso de la modelo, su propuesta más sobria de camisa blanca con hombros exagerados con pantalón negro sastre contrastó con opciones de fiestas deslumbrantes.

MOSCHINO

La marca italiana se presentó en el jardín de Bryant Park con su logo podado en flores. Esta ubicación tenía un significado, fue un homenaje a sus primeros años en Nueva York, alrededor de la década de 1990. Su propuesta estuvo llena de coquetos conjuntos de minifalda y chaqueta el estadounidense Jeremy Scott, desplegó su fantasía con estampados «patchwork» de dibujos infantiles en vestidos ajustados como el que lució la supermodeloGigi Hadid, que cerró el desfile con un biberón en la mano en un con aires setentosos en colores pastel o cítricos, con accesorios que llamaron la atención como, por ejemplo, los bolsos hechos con juguetes de niños. Su director creativo, 64 guiño a su reciente maternidad. «También hay un guiño a “The Nanny” porque Fran Drescher usó mucho Moschino, pequeños trajes icónicos que fueron furor», explicó el diseñoador en el backstage.

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